
El mural se ubica en la calle Bon Viatge de Sant Joan Despí
«Si quería hacer un homenaje a Jujol, nada mejor que hacer un homenaje a la naturaleza, tan presente en todas sus obras, y apelando a algo que ya existe en ese espacio como es un árbol, tal como hacía Jujol con lo que había en el entorno de donde trabajaba», explica Ampparito, el artista que ha pintado el mural.
De esta forma, la obra es un retrato en gran tamaño del árbol que hay delante del edificio. «La idea es anclar el árbol de 2019 en el edificio, de manera que, cada año que pase, cuando el árbol de verdad sea podado y quede con su estructura al descubierto, podamos ver los cambios que se han producido comparándolo con el del mural; unos cambios imposibles de predecir, al igual que la gestualidad de Jujol», según el artista.
Las ramas del árbol del mural, apenas podadas, recuerdan la expresiva y espasmódica caligrafía jujoliana y también la forma como Jujol modelaba la forja, con sus característicos cortes, deformaciones y abolladuras, similares a cómo un árbol se modela a sí mismo.

Los hijos de Jujol, Josep Maria y Teresa, y el artista Ampparito
Ignacio Nevado ‘Ampparito’ fue el artista seleccionado de entre las 30 propuestas que el Ayuntamiento de Sant Joan Despí recibió en el concurso internacional convocado para la ejecución del mural en conmemoración del Año Jujol140. Una vez seleccionado, Ampparito ha realizado una estancia en Sant Joan Despí para profundizar en la figura y la obra de Jujol y realizar el diseño del mural.
Tanto en el proceso de elaboración del concurso internacional como en el acompañamiento del artista escogido durante la realización del mural, el Ayuntamiento ha contado con la colaboración de Contorno Urbano, una fundación sin ánimo de lucro que tiene como objetivo estudiar, promover y conservar la creatividad y el arte urbano.